Víctor Vázquez Bayarri

 

Encuentro artístico en el Real Casino Antiguo este jueves 

La expresión de un instante, la palabra de un color…un poema en la canción… así se expresa Víctor Vázquez Bayarri cuando lanza su invitación a los castellonenses para que le acompañen el próximo jueves 2 de noviembre, a partir de las 20.30 horas, a un encuentro artístico en la cafetería del Real Casino Antiguo de Castellón. Cuadros y dibujos en una exposición que es el pretexto para compartir el quehacer artístico de este polifacético pintor, escritor, miembro fundador de ALCAP, poeta y cantautor con sus amigos y seguidores.

Víctor Vázquez aprendió desde muy joven a observar detenidamente todo lo que le rodeaba, primero de la mano de un lúcido preceptor y, más tarde, gracias a su sed de conocimientos y su capacidad innata para crear y expresarse a través del dibujo. Criado entre Castellón y Galicia, sus referentes son tanto celtas como mediterráneos. Pintar, escribir o cantar son para Víctor Vázquez disciplinas con las que aprender siempre algo más de ese mundo circundante. 

En las paredes del Real Casino Antiguo el público contemplará trabajos de diferentes etapas creativas de su autor. Temas que le han acompañado desde bien temprano como las gitanas, a las que gusta de representar con zigzagueantes perfiles; banderilleros sorprendidos en un baile efímero; caballos que le recuerdan a su infancia, cuando convivió con ellos muy de cerca; instrumentos musicales como su inseparable guitarra, temas de la tauromaquia o siluetas de mujeres. “En todos ellos busco el pequeño detalle, el gesto elegante, lo más genuino y humilde”, señala Víctor Vázquez. 

También ha escogidas piezas muy ligadas a su biografía como un grupo de pescadores de sardinas lanzando sus redes para la pesca del arrastre o ‘Barca azul’ donde una solitaria embarcación se deja mecer por las aguas en una escena sombría por la inminente amenaza de tormenta que asoma en los cielos grises.

En cada pieza una historia, un universo cargado de significados a la espera del espectador sensible. Como afirma el autor, cada obra ofrece un mundo por descubrir, pues “una obra es una caricia”. “Arrastro mucha vivencia, muy densa y colorida, igual que los pinceles con los que mojo mi pintura”, añade este poeta de la vida... y algo alquimista.